He hablado de Hedi Slimane, que me parece un señor muy polifacético, que comisionó la exposición "Sweet birth of youth" en Berlín.
Reunió a varios artistas que consideraba, estaban dentro de esa nueva generación del Ahora. Frescos, dinámicos, rebeldes sin causa y absolutamente superfluos (y no es una crítica, tesoros.)
Las fotografías de este post pertenecen a Ryan Mcginley. Fotógrafo formado en la Parsons de NY y mí favorito.
Cuentan que Dash Snow (artista que participó en la misma exposición) era un adolescente conflictivo. Se emborrachaba, se drogaba y consecuentemente al día siguiente tenía la cabeza en blanco.
No corto ni perezoso, se hizo con una cámara Polaroid y se dispuso a documentar sus noches para poder saber que había hecho la noche anterior.
Ryan Mcginley, por entonces estudiante, le conoció. Se hicieron colegas y convenció a Dash para que publicara su material.
Dicen que Mcginley no sería nada sin Dash. Eso dicen. Otra cosa es lo que yo crea.
Leo al mismo tiempo, El club de los suicidas de R.L. Stevenson, La casa de Muñecas de Ibsen y El gatopardo de G.Tomasi di Lampedusa.
Vamos que estoy de un gafapasta insoportable.
Pero me parece curioso que el autor de El Gatopardo escribiera sólo este libro. Libro que es lo siguiente a bueno. Un noble pobre y arruinado que enlaza con el club de los suicidas, por lo menos en su trama. Este, me está gustando especialmente. No se porque me recuerda a su vez a la peli de El Cazador. En el momento en que el rubio que se ha vuelto loco juega a la ruleta rusa con los asiáticos. ¡Qué escena!
Ayer vi Scoop de Woody Allen. Me resultó divertida, sobre todo en las escenas de la barca de Caronte. Hoy va de enlazar, porque me acordé del Viaje de Mastorna, un guión de Fellini, lleno de fellinis, es decir, de putas y obispos.Volviendo a lo de las escenas, hay escenas de pelis que te marcan para siempre. La imagen de Liv tyler retratada debajo de un arbol en Belleza Robada. El diálogo entre la madre del amante muerto y la amante de The Pillow Book. El cruzado en la playa jugando con la Muerte. Wagner sobrevolando las playas de Vietnam o Margot caminando al encuentro de su amor secreto con Nico de la Velvet de fondo. Buscadlo en youtube (el vídeo se llama, by the way of the green bus line)
Y con esto termino enlazando a todo lo dicho mi visión antropológica. No lo puedo evitar, pero pienso que somos la generación audiovisual, no se donde leí que el cine de Tarantino es una mezcla de influencias de distintos tipos de cines en lo que nada es real, decían que la fuente de inspiración del arte ya no es la experiencia real, sino la memoria audiovisual.
Yo confieso.
Que soy hija de las nuevas tecnologías y que crecí enamorada de Luke Sky Walter, que la primera referencia de miedo que puedo recordar, es la ballena de Pinocho y que alguna vez junté los talones para intentar escaparme a Oz.
¡Mon Dieu! ¡Como estoy hoy!
Dentro de poco me veo en alguna expo de La casa encendida con victorias, camiseta de los ramones y explicando mi teoría sobre porque el artista hace de sus pedos arte.
*He cambiado el color del texto temporalmente hasta que consiga solucionar está maraña de codigos HTML para conseguir un blog aceptable.
