domingo, 7 de abril de 2024

Comienza la primavera. Florece el cerezo.

"Crear es vivir dos veces"

Albert Camus


Leo sobre Les Bains Douches mientras escucho a Tracy Chapman cantar Fast Car.


So I remember when we were driving, driving in your car

Speed so fast it felt like I was drunk

City lights lay out before us

And your arm felt nice wrapped ´round my shoulder

And I-I had a feeling that I belonged

I-I had a feeling I could be someone, be someone, be someone


Hay en el audiovisual, algo que se acerca a contestar algunas de las preguntas que me hago. O por lo menos, me hacen pensar que no estoy tan sola cuando me las hago. Lo pensaba con Poor Things, cuando Bella Baxter dice que su amante está roto. ¿No estamos todos rotos? me preguntaba yo en el cine. No somos más que niños que juegan a ser adultos. De esto también se habla en Fleishman está en apuros. ¿Cómo he llegado aquí? se pregunta Toby, pero también Libby o Rachel. La música, además, es de Caroline Shaw, que consigue hacer lo ordinario extraordinario.



Esa también es Isabel Quintanilla. Cómo cuenta historias de presencia sin necesidad de mostrar figuras. Cómo crea su propio universo y un metamundo y detiene el tiempo en él.

Me imagino a Isabel de vuelta del mercado, con la compra encima de la mesa de su cocina. Un bote de aceite, un pollo deshuesado listo para asar. Un vaso de agua fresca que descansa en la encimera. Ha salido a comprar después de pasar un rato dándole los últimos retoques a un cuadro que es una vista de Roma. La ciudad de su juventud, de sus primeros años de casada, de un tiempo en el que todo estaba por hacer. Puede ser un día de primavera de 1970 en Madrid.

Después de lavarse la manos, sale de la cocina y pasea cual Flaneur por las estancias de su casa. Busca un nuevo rincón que le llame la atención, un nuevo punto de vista para contarlo todo de nuevo. A lo lejos, oye a su hijo Francesco, jugar.

Pasa por el estudio de Paco y aparta un saco de cemento. No le escucha pero si le siente. Paco siempre está. Piensa que quizá luego Antonio y María se acerquen a charlar. Imagina que a lo mejor, si consigue contar una historia, la historia de su felicidad tranquila, la de su casa, su universo, conseguirá atrapar el tiempo y con ello, la eternidad

Isabel es la idea y el deseo de hacer lo ordinario extraordinario, ese retratar la belleza de un instante, ese elevar lo cotidiano, que es en suma, la felicidad. 

Isabel es "Paterson" (2016) de Jim Jarmusch, es "Perfect Days" (2023) de Win Wenders. 

Es Javier Gomá diciendo: Vive de tal manera que tu muerte resulte escandalosamente injusta.


Y llego por fin a volver a la novela. La novela de mi vida. Aquella que habla de todos los temas que me interesan. El paso del tiempo, los caminos que no se escogieron, la necesidad de tener un legado, la idea de trascender y al mismo tiempo, la idea de que no somos nada, ni nadie y que nadie se acordará de nosotros.

El elegir un camino sin retorno pero que al mismo tiempo es el único posible a una existencia asfixiante. El amor no correspondido. Los recuerdos tergiversados y por fin, el fin último, el crear para salvarse, para sentir que todo ha merecido la pena y que no sólo somos sargazo a la deriva en el océano. 

Todos somos esa mujer que le pide a Jolene que no le robe a su hombre.

lunes, 1 de enero de 2024

The sea hath its pearls

"... En medio del odio descubrí que había, dentro de mí, un amor invencible. En medio de las lágrimas descubrí que había, dentro de mí, una sonrisa invencible. En medio del caos descubrí que había, dentro de mí, una calma invencible. Me di cuenta a pesar de todo eso... En medio del invierno descubrí que había, dentro de mí, un verano invencible. Y eso me hace feliz. Porque esto dice que no importa lo duro que el mundo empuja contra mí; en mi interior hay algo más fuerte, algo mejor, empujando de vuelta."

Albert Camus



Quise borrar todo rastro de ti en año nuevo.
Que desapareciera la huella de tu presencia de mi memoria como una pisada en la arena.
Tener la certeza de que, la calidez que vendrá a partir de ahora, me bañe y me meza y me haga volver a pensar que la primavera está por llegar.
Los brotes verdes me harán ver la vida desde un prisma nuevo, limpio, transparente.

Volveré a emocionarme y a pensar que si, 
que hay esperanza, que la vida me depara todavía sorpresas.
Volveré a despertarme con la suave brisa de la mañana y el sol calentará mi piel.
Y nuevas experiencias vendrán y sabré,
Que no fuiste el final, sino el principio.

La lección que necesitaba recordar
Para saber que la felicidad no reside en el otro, sino en mi. 




domingo, 22 de octubre de 2023

En octubre empieza el otoño

Yo soy dos.

Dos mujeres dicotómicas. 

Primero me miro en el espejo, busco las señales del tiempo, me hago desear. Más tarde pienso en la intranscendencia del todo. De las noches, de sus días, de una cuenta llena el primer día del mes. 

Somos siempre dos, dos que conviven, que luchan, que se abrazan y que la mayoría del tiempo, hablan, pero no se escuchan.

El es dos.

Dos hombres dicotómicos.

Primero, se mira en el espejo. busca las señales del tiempo, se hace desear. Más tarde piensa en la intrascendencia del todo. De las noches, de sus días, de una cuenta llena el primer día del mes.

Son siempre dos, dos que que conviven, que luchan, que se abrazan y que la mayoría del tiempo, hablan, pero no se escuchan.



Somos dos.

Dos personas que nos encontramos

Que no se miran en el espejo, porque el uno es el reflejo del otro y no buscan más señales en el tiempo, de porque no se descubrieron antes.

Más tarde piensan en la intrascendencia del todo. De las noches, de sus días, de una cuenta llena el primer día del mes. Y si eso no importa, ¿Por qué no saltar? ¿Por qué no sentirse vivo de nuevo?

Somos dos ahora mismo, dos que conviven en la cabeza del otro, que luchan por no dejarse llevar y aún así se dejan. 

Dos que se abrazan en la noche sudorosos y 

que la mayoría del tiempo, 

se escuchan aún sin hablar.




lunes, 17 de octubre de 2022

Rutina de la tercera semana de octubre de 2022.

 


Andar por la calle mayor casi a trote.

Evitar socavones, evitar transeúntes

Turistas que paran en seco a hacer una foto.

Seguir viendo las contraventanas azules en la casa de Marías al pasar por la Plaza de la Villa.

Plantearme mientras paso por delante del congreso si hice bien.

Esperar un mensaje. Una llamada.

Evitar una llamada, poner el móvil en silencio.

Pensar en como revisionamos el pasado mientras me como un croissant delante de la pantalla del ordenador.

Acordarme de que no he leído lo que mandaron esta semana para la clase de novela.

Vestirme para un cóctel. Saludar. Sonreír.

Volver a casa caminando a medianoche.

Pensar en el futuro. Imaginar un futuro distinto.

Pensar que tengo que hacer en los próximos diez minutos antes de empezar la siguiente reunión.

Olvidar. Recordarle

Sentir que empieza a hacer frío

Dedicar un domingo a sacar la ropa de invierno y guardar la de verano.

Sentirme plena con mi presente. Odiar mi presente.

Planchar con los cascos puestos. Reír sola.

Planear el viaje del siguiente fin de semana.

Vivir. 

Escribir aquí. 

Volver aquí, siempre.




miércoles, 21 de septiembre de 2022

Soy yo la que está vacía ahora.


Sólo queremos que nos arropen.

Qué las cálidas mantas nos cobijen en inviernos que se expanden.

Que los dedos se rocen sin pretenderlo, pero queriendo,

Qué las miradas vayan más allá de lo dicho.


Sólo queremos sentirnos vivos.

Sólo una vez más, porque el pasado no importa.

Porque la vida es ahora y siempre se busca ese momento

Aquel por el que se nace. Aquel por el que se pierde.


Sólo queremos que nos deseen.

Que las llamadas no cesen y el canto sea siempre para nosotros

Que nunca se apague la curiosidad por descubrir nuevos gestos

Que ahora sea siempre y sentir, por una vez, sólo por una vez,

Que no estamos solos. Que algún día fuimos bellos.


Corazón tan blanco

"Qué poca distancia entre el todo y la nada, entre la vida feroz y la muerte, entre el pánico y la piedad" 

Javier Marías 1951-2022




He pasado muchas veces, más de las que puedo recordar, por delante de su edificio. Nunca, estando sola o acompañada dejé de levantar la vista hacia la ventana de su despacho, la primera por la derecha del cuarto piso.

Especialmente por las tardes, cuando ya empezaba a anochecer, salía de ahí una luz cálida y burdeos y yo me imaginaba a Marías escribiendo al son del ritmo de las teclas de su máquina de escribir, con un cigarrillo humeante en su cenicero, enmarcado por sus libros, concentrado en su tarea. Vidas dentro de vidas. Mundos dentro de mundos.

Esta mañana al pasar, me he encontrado todas las contraventanas cerradas que nunca supe que eran de azul celeste. Como si ellas también estuvieran de duelo por su muerte, de un luto riguroso por esos mundos, esas vidas, que ya no serán.

martes, 6 de septiembre de 2022

On board - off board

Y si subieras a bordo sé que buscarías la seguridad de un parpadeo de faro

Cualquier puerto en una tormenta, amor

Prometes que no flaquearás pero he visto a hombres hundirse

Así que deberías subir a bordo con alguien cuyo curso sea más estable que el mío

Deberías subir a bordo con alguien cuyos ojos estén en el horizonte, no en los cielos

A bordo con alguien cuya ancla sea más pesada que la mía.

Y si subieras a bordo sé que te cansarías de las sacudidas de mi lecho marino

Y olvida lo que dije. Los barcos no fueron construidos para ser seguros

Así que deberías subir a bordo con alguien cuyo curso sea más estable que el mío



Todas las historias son la misma. Todas las caras te pertenecen pero no las caricias, esas carecen ya de nombre porque empiezan ya a perderse en el abismo de la memoria. Me caigo por una espiral de recuerdos encontrados y de pesadillas y sueños que nunca tienen estructura, ni fin, ni nunca la tendrán. Sueños etéreos, quebradizos. Sueños que sueñan con ser sueños.

Los deseos frustrados se pierden en un mar inmenso que ya no me siento capaz de abarcar. Se mecen como sargazo y van a la deriva y gritan al vacío que ya no hay salvación posible. Qué no merece la pena seguir nadando y que hace frío. Y qué qué puede pasar si dejo que el cuerpo flote y que no ocurra nada. Si miro hacia las estrellas que ya no me aportan guía posible y dejo de pensar, de amar, de intentarlo. De esperar, de mirar hacia atrás, por si estás. Por si en realidad si importaba algo y viniste a buscarme. Por si en algún momento fugaz llegué a ser algo para ti más de lo que soy ahora: Un mensaje perdido, una anotación de pie de página, una frase subrayada en un libro que ya no volverás a tocar. 

Un sueño que pudo ser sueño pero que sólo soñó que era un sueño en el que todas las historias son las mismas y las caricias se hunden en el un mar ahogado de recuerdos imaginados.